Aunque que siempre hemos sido muy críticos con el uso de nombres personales para titular negocios ( sobre todo si son diminutivos o demasiado castizos ), y pese a que es una de las tácticas comerciales más habituales, no podemos restarle valor a aquellos ejemplos que, aún empleando tal técnica, lo hacen de forma acertada. Tal es el caso de este taller de relojería. de origen anglosajón, que sobre un elegante fondo negro coloca un nombre completo ( nombre de pila+apellido ), de recuerdo
peluqueril, usando una tipografía de gran personalidad, con una belleza contenida pero evidente. Mesura y contención rotulista.
Ubicación: La Valeta ( Malta )
Comentarios
Publicar un comentario