Serie B: rótulos (217)

Si existe un desayuno tan castizo como reconstituyente ese es el que hace acompañar al café con una buena ración de churros, esos trozos de masa frita tan crujientes y aceitosos como vigorizantes y sabrosos. Y qué mejor nombre para una churrería que el de Amanecer, conectando la más señera franja temporal del día para deglutir tales artefactos fritos ( aunque tampoco podemos desdeñar la opción de comerlos en la merienda ). Para acompañar tal nomenclatura se adjunta un cuasi idílico paisaje de unas montañas, detrás de las cuales despunta un sol naciente, y hasta un pajarillo se atreve a aparecer. Esta ingenua conjunción de elementos nos recuerda a la portadilla de un cuaderno de los testigos de Jehová, aunque ello queda matizado/tamizado por el olor a fritanga.

Ubicación: Avenida de la Constitución ( Benalamádena-Arroyo de la Miel )