Lo que antes era el cerebro financiero de cualquier tienda o negocio, ahora, por mor de la informática, es todo un reducto, pese a cierta evolución sofisticada, de una forma en cierto modo arcaizante de contabilizar las cuentas; nos estamos refiriendo al uso de las cajas registradoras. El rótulo, de diletante sabor añejo, anuncia a una de las firmas claves en la fabricación de estos artefactos, y presenta el nombre de la compañía enmarcado en una especie de tabulador y anunciando someramente el tipo de negocio, todo ello usando un desvaído tono rojizo. Este rótulo es de los que hacen caja.
Ubicación: C/ Duquesa de Parcent ( Málaga )
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