Serie J: los " otros " rótulos (15)

El mundo de las pegatinas obsoletas y bien adheridas vuelve a dejarnos un estupendo ejemplo de marca y logo periclitadas y extinguidas. Esta vez se trata de una de las marcas más señeras y deglutidas por los niños de los años 80, esto es, Bollylandia. Era la marca bajo la cual el fabricante Panrico aglutinaba una amplia y surtida gama de productos de pastelería diaria, caso de las palmeras, caracolas, susos y demás manjares escolares que endulzaban los recreos. Sobre un reconocible fondo amarillo se colocaba el infantil nombre, con ecos de cuento dulce, con una tipografía abombada, algo glotona, atropellada, llena de redondeces y que culmina con una estrella que ampara a la R de marca registrada.  Una harto discutible campaña de rebranding hizo desaparecer esta denominación, pasando a convertirse en la sosa y matemática Qé, suponiendo toda una merma sentimental para aquellos criados entre rebosante chocolate. Y es que pocas marcas son tan evocadoras de una eclosión de sabores tan lejanos y recordados, configurándose en una especie de palmera o caracola industrial proustiana.

Ubicación: Avenida de Ortega y Gasset ( Málaga )