Montar un restaurante con filiación geográfica y cocina local puede ser toda una aventura decorativa, que a veces puede irse de las manos. Es el caso de este restaurante griego, en Lovaina, con nombre de isla griega y cuyo rótulo principal se realiza en una estupenda topografía historicista que recuerda a la de los título de crédito de tantos
peplums. Pero el guiño histórico no queda ahí; a ello se suman unas columnas estriadas, unas cariátides protectoras de la carta del menú y todo un despilfarro pseudoarquitectónico, de inspiración
partenoniana, con un tímpano cuajado de figuras de estilo cerámico clásico, sustentado sobre una base de metopas y triglifos. Todo un delirio
kitsch digno de una producción italiana de los años 60 de espada y sandalias, o sea, de romanos.
Ubicación: Bondgenotenlaan ( Lovaina )
Comentarios
Publicar un comentario